Por Osvaldo Guerrero
La presentación del “Proyecto de Nación 2024-2030” por parte de la Presidenta,
Dra. Claudia Sheinbaum, ha generado un amplio debate en torno a los objetivos y
metas que se proponen para el futuro de México. Aunque toca temas relevantes
para nuestro país, hay un aspecto que ha pasado desapercibido, la relación de
este proyecto con la Agenda 2030 para el Desarrollo Sostenible.
La Agenda 2030 de la ONU establece 17 Objetivos de Desarrollo Sostenible
(ODS) que buscan erradicar la pobreza, proteger el planeta y garantizar la
prosperidad para todos. El documento presentado por Sheinbaum apenas
menciona la migración y el desplazamiento forzado interno, a pesar de la magnitud
de estos fenómenos en México. Según el Centro de Monitoreo del Desplazamiento
Interno, en 2021 la violencia y los conflictos obligaron a 29,000 personas a
desplazarse internamente en México.
Frente a esta realidad, es urgente que el gobierno de Claudia Sheinbaum incluya
en su proyecto de nación una política migratoria integral que aborde los temas de
la migración y el desplazamiento forzado interno. Esto incluye la creación de
programas para atender a las personas desplazadas, la protección de los
derechos humanos de los migrantes y la promoción de la integración de los
migrantes en la sociedad mexicana.
La agenda 2030 establece varios objetivos que están relacionados con la
migración, como el ODS 8, que busca promover el crecimiento económico
sostenible y el empleo pleno y productivo, y el ODS 10, que busca reducir la
desigualdad entre y dentro de los países. Es importante que el gobierno de
Claudia Sheinbaum incluya en su proyecto de nación estrategias para alcanzar
estos objetivos y abordar los temas de la migración y el desplazamiento forzado
interno.
En conclusión, el Proyecto de Nación 2024-2030 es un documento ambicioso,
pero su falta de una estrategia clara en materia migratoria es una omisión
preocupante. Si el gobierno busca una visión integral de desarrollo, no puede
ignorar un fenómeno que afecta a miles de personas cada año. La migración y el
desplazamiento forzado deben ocupar un lugar prioritario en la agenda nacional.